Teileriosis - Ganado Bovino
También conocida como: Teileriosis Bovina — Theileria — Fiebre de la Costa Oriental — Fiebre de Egipto — Teileriosis Tropical — Fiebre de la Costa Mediterránea
Causada por: Theileria parva — Theileria annulata
Introducción
La theileriosis es una enfermedad de mamíferos y aves causada por un protozoo patógeno que reside en el interior de linfocitos y macrófagos.
T. parva y T. annulata aparecen en bovinos y T. lestoguardi en el ganado ovino, siendo éstos los de mayor importancia económica en los rumiantes domésticos.
Las especies de Theileria están estrechamente relacionadas con los parásitos del género Babesia.
Características
Los búfalos, tanto domésticos como salvajes, parecen ser menos susceptibles a la theileriosis.
Los animales autóctonos también parecen tener un mayor grado de inmunidad innata en las zonas endémicas de las cuales son importados, incluso los de la misma raza.
Las frisonas son especialmente susceptibles a la infección por especies de Theileria.
Momentos como el parto, la lactancia y situaciones de estrés son factores que predisponen a un animal al padecimiento de la teileriosis, como ocurre en cualquier enfermedad.
Sin embargo, la tolerancia ligada a la edad puede hacer a los terneros más jóvenes más resistentes a la enfermedad que los adultos en algunas zonas.
Distribución
La distribución de la enfermedad depende de la presencia de garrapatas, ya que actúan como vectores y por lo tanto se haya principalmente en las regiones tropicales. Están implicadas varias especies de garrapatas.
La distribución de teileriosis es cada vez más amplia.
Transmisión
Las especies de Theileria invaden primero los los ganglios linfáticos locales de los hospedadores, antes de la formación de esquizontes y la difusión a través de los tejidos linfoides.
La reproducción asexual en el hospedador es seguida por la reproducción sexual dentro de la garrapata (vector). El parásito se transmite al hospedador mamífero a través de las glándulas salivales de la garrapata durante la alimentación de sangre de ésta.
Para más información sobre las garrapatas como vectores, consulte Theileria y Transmisión de Enfermedades por Garrapatas.
En las zonas endémicas, a menudo se alcanza la estabilidad endémica. Son zonas en las que la mayoría del ganado o incluso su totalidad puede estar infectado y todos los individuos pueden ser portadores, estando la mayoría de las garrapatas también infectadas. De este modo también los terneros jóvenes adquieren una inmunidad sólida de sus madres inmunes y por lo tanto rara vez muestran enfermedad clínica. Aún así, llegar a este estado de estabilidad requiere tiempo y provocará importantes pérdidas económicas en el proceso.
Signos Clínicos
Fiebre marcada, ganglios linfáticos aumentados de tamaño, disnea, epistaxis, emaciación, diarrea y otros síntomas gastrointestinales.
Pueden desarrollarse signos oculares y masas.
También pueden observarse prurito y lesiones en la piel o placas.
Los signos neurológicos y reproductivos pueden aparecer en enfermedad de tipo crónico o endémico.
El grado de fiebre, la carga parasitaria y la susceptibilidad del hospedador determinará la gravedad de presentación de los signos clínicos.
Diagnóstico
La detección de las distintas fases del parásito en frotis de muestras de sangre teñidos con Giemsa. Los esquizontes deben ser buscados en los frotis de nódulos linfáticos o en biopsias del hígado.
En el examen post mortem, la sangre es líquida y los cadáveres presentan ictericia y aspecto gelatinoso. Pueden estar presentes numerosas petequias en las membranas mucosas, mucosa intestinal y corazón. El hígado suele estar pálido y friable y la vesícula biliar distendida con bilis de color verde oscuro. Las úlceras son a menudo evidentes en el abomaso de los rumiantes y están rodeadas de zonas hemorrágicas. La orina es marrón oscura debido a la presencia de bilirrubina. Puede presentarse edema pulmonar.
Hay pruebas de inmunofluorescencia indirecta (IFI) y ELISA que también están disponibles y son útiles para identificar los animales portadores.
Los esporozoítos también pueden ser detectados dentro de las glándulas salivares de las garrapatas por tinción con metil-verde pironina y, de forma más actualizada, con PCR.
Tratamiento
Quimioterápicos como la buparvaquona y halofuginona y/o tetraciclinas son los tratamientos de elección.
Control
El control de garrapatas vectores y el uso de las especies de acogida resistentes a las garrapatas como el ganado cebú en las zonas endémicas es efectivo pero costoso.
Se debe tener cuidado con el uso intensivo de ectoparasiticidas para controlar las garrapatas, ya que el recrudecimiento de brotes de otras enfermedades transmitidas por garrapatas no son infrecuentes cuando se interrumpen los programas.
La estabilidad endémica puede ser apoyada con la cría de animales portadores autóctonos o animales importados conocidos, aunque a menudo son todavía infectantes para las garrapatas, de modo que la separación de los adultos de los animales susceptibles es esencial para evitar una mayor propagación de la enfermedad.
Existen vacunas disponibles con esquizontes atenuados de las células infectadas y son el pilar principal de la teileriosis tropical en los países endémicos con razas de ganado altamente susceptibles.
Referencias
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Este artículo fue originalmente de The Animal Health & Production Compendium (AHPC) publicado en el web por CABI. Hoja(s) de datos utilizados: bovine theilerioses el 3 June 2011 |
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Este artículo ha sido revisado por pares, pero aún no ha sido evaluado por un experto. |
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Este artículo ha sido traducido de Inglés por 'Raquel Salero Toranzo' - 20.02.2012. |